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El Sistema Piraña es la primera nueva tecnología creada en mas de 130 años para tratar aguas residuales residenciales. Es un método para mejorar sistemas sépticos in situ, que permite tratar las aguas residuales, alargando la vida útil del tanque y el lecho de infiltración. El Sistema Piraña ha resultado en ahorros de más de US$ 10 millones a miles de propietarios de sistemas sépticos fallidos, desde viviendas unifamiliares a hoteles y complejos turísticos en los EE.UU. y en 14 países alrededor del mundo.
ELIMINA LOS COSTOS CADA VEZ MÁS ELEVADOS Y LOS DAÑOS A LA PROPIEDAD DERIVADOS DE LA REPARACIÓN DE SU SISTEMA SÉPTICO
Porqué fallan los sistemas sépticos
El propósito de un sistema séptico estándar (sin el Sistema Piraña®) es purificar el agua que acarrean los desechos orgánicos hasta el tanque séptico. Esto lo hacen los tres componentes de un sistema séptico esencialmente por filtración. Conozca, a continuación, las tres partes y el funcionamiento de su sistema séptico, así como las causas de su falla.
Un filtro se define como un aparato, dispositivo o proceso que elimina una parte de cualquier corriente de material que pase a través de él. Así se define el funcionamiento de las tres partes de un sistema séptico. El primer filtro es la fosa séptica anaeróbica (sin oxígeno en el agua); el segundo filtro es el campo de eliminación/infiltración; el tercer filtro es el suelo nativo que rodea el campo de eliminación/infiltración y que proporciona el tratamiento final.
Primer Filtro
Las aguas residuales entran a una fosa séptica en forma de sólidos (materia orgánica) arrastrados por el agua. Las bacterias intestinales humanas y los microbios de las heces sobreviven en una fosa séptica anaeróbica (sin oxígeno). Quedan suspendidas en el agua. Las bacterias descomponen los sólidos del agua en dos capas: lodos sedimentados en el fondo y sólidos flotantes en la superficie. Entre el 80% y el 90% de los sólidos quedan retenidos en la fosa séptica dentro de estas dos capas. El agua entre estas dos capas es el agua residual que fluirá hacia su campo de eliminación/infiltración. Contiene un número reducido de bacterias intestinales problemáticas, materia orgánica y finas partículas en suspensión. Esta agua contaminada anaeróbica (sin oxígeno) sale de la fosa séptica y fluye a su campo de eliminación/infiltración. Esta separación y retención de sólidos en su tanque séptico es el primer filtro.
Segundo Filtro
El agua contaminada anaeróbica (sin oxígeno) de la fosa séptica entra en el campo de eliminación/infiltración, y se desplaza lentamente a través del campo de infiltración, permitiendo que parte de la materia orgánica soluble se deposite en el fondo, junto con partículas en suspensión, incluidas las bacterias y microbios. Esto forma una especie de lodo denominado “biomat” (tapete biológico). Una parte de las aguas residuales con contaminación reducida es absorbida por el suelo nativo circundante. Este proceso es la filtración.
Tercer Filtro
El agua anaeróbica (sin oxígeno) contaminada y filtrada dos veces es absorbida por el suelo nativo aeróbico (con oxígeno) que rodea el campo de vertido / lecho de infiltración.
Tras atravesar entre 1.0m y 1.5m de suelo nativo aeróbico inalterado, el agua se purificará gracias a que los poros del suelo capturarán y retendrán la materia orgánica soluble, las partículas, las bacterias y los microbios restantes en el agua contaminada. Las superficies del suelo nativo inalterado en el campo de vertido/infiltración captan la mayor concentración de materia orgánica soluble, partículas y bacterias y microbios. Las bacterias intestinales anaerobias colonizan estas superficies infiltrantes y segregan una capa de limo negro denominada “biomat” (tapete biológico), que también filtra y retiene la materia orgánica, las partículas y los microbios.
El fallo del campo de eliminación/infiltración está causado por el “biomat” (tapete biológico). El “biomat” obstruye los poros del suelo en las superficies de infiltración del campo de vertido, inhibiendo el movimiento del agua hacia el suelo nativo. La parte inferior del campo de vertido/infiltración se obstruye primero. Una pequeña parte del agua contaminada no puede ser absorbida cada día. El agua contaminada se acumula en el fondo del vertedero. En los lugares donde el agua contaminada entra en contacto con las paredes laterales del campo de eliminación/infiltración, las bacterias intestinales colonizan estas superficies segregando más “biomat”. La profundidad líquida del agua contaminada en el campo de vertido/infiltración aumenta. Con el paso de los años, el “biomat” obstruye todas las superficies de infiltración del campo de drenaje/infiltración y éste se llena de agua contaminada. Se produce un fallo en el lecho de drenaje/infiltración. Según la EPA (Environmental Protection Agency), el “biomat” es la causa del 95% de los fallos de los sistemas sépticos.
Problemas comunes del sistema séptico
El fallo del sistema séptico presenta una serie de síntomas comunes:
1) Suelo blando y húmedo sobre el vertedero o la fosa séptica.
2) Manchas húmedas o agua estancada sobre el campo de eliminación o la fosa séptica.
3) Inodoros que desaguan lentamente o que no desaguan cuando se tira de la cadena.
4) Salen aguas residuales por el desagüe de la ducha o la bañera al tirar de la cadena.
5) La mayoría de los síntomas de fallo van acompañados de olores desagradables.
Antes del Sistema Piraña®, la única solución para un sistema séptico que ha fallado era sustituir el campo de drenaje/infiltración. Cada vez más, se requieren complicados sistemas de tratamiento de ingeniería que cuestan decenas de miles de dólares más. Estos sistemas de ingeniería son tan ineficaces que siguen necesitando los tres filtros después de añadir un proceso aeróbico entre el primer y el segundo filtro. Desde el año 2000, el Sistema Piraña® ofrece la única alternativa rentable certificada a esta solución cara y perjudicial.